Memorias de un soñador
Segunda parte

Con curaduría de Alfredo Srur y la participación de Bruno Dubner como editor invitado, CIFHA presentó en 2021 Alejandro C. Del Conte: Memorias de un soñador en Arte x Arte.

La exposición daba a conocer el archivo del fotógrafo, escritor, editor, periodista, publicista, cineasta y empresario Alejandro Del Conte (Buenos Aires, 1897-1952), abarcando desde sus fotografías familiares y profesionales hasta documentos administrativos, correspondencia, publicaciones e imágenes actuales de los lugares que frecuentó en el Norte argentino, donde se había dedicado a la distribución cinematográfica  y a la publicación del periódico Film Gráfico. En su retorno a Buenos Aires, fundó y dirigió durante más de treinta años la influyente revista Correo Fotográfico Sudamericano, que su hijo y su esposa continuaron editando luego de su fallecimiento hasta 1959. La muestra tuvo lugar luego de cuatro años de investigación y fue acompañada de un libro que reúne reproducciones de obras y documentos, además de una introducción de Srur y dos ensayos especialmente desarrollados por el investigador José Antonio Navarrete y  por  Andrea Cuarterolo con Emiliano Jelicié. 

Reproducimos aquí un fragmento del  texto de Navarrete. Para leerlo completo y descargar el libro, pueden registrarse y acceder a los contenidos exclusivos. 

Link al libro.

El Correo Fotográfico Sudamericano y América Latina

Con una temprana vocación latinoamericanista, se gestó en varios países de América Latina, en la segunda mitad de los años treinta del siglo pasado, una nueva ola del movimiento de asociación de aficionados y profesionales interesados en la práctica de la fotografía como arte, que se adhirió al modelo del foto-club. En 1939, con el aporte de foto-clubes de Argentina, Brasil y Chile, la mayoría de ellos recién formados, más el de los fotógrafos uruguayos en proceso de organización de su propia entidad, se celebró en Montevideo el Primer Salón Internacional Sudamericano de Fotografía Artística, que se organizó conjuntamente con el II Salón Nacional “Cien Fotografías”.

El evento que reunió estas muestras fue inaugurado el 10 de junio con la participación del Foto Club Argentino (fundado en 1936), con domicilio en Buenos Aires, Foto Club Pigué, Foto Club Tucumán (1938) y Foto Club de Rosario (1933), todos de Argentina; Foto Clube Bandeirante (São Paulo, 1939), luego Foto-Cine Clube Bandeirante, y Foto Clube Brasileiro (Rio de Janeiro, 1923), ambos de Brasil; Club Fotográfico de Chile (1937), luego Foto Cine Club de Chile, y el Foto Club Uruguayo, formalmente en funciones desde 1939 y con fecha oficial de constitución en 1940.  Este proyecto expositivo, sin precedentes en el ámbito de la práctica fotográfica artística en América Latina por su carácter regional desde su propia concepción, es un episodio que se sitúa en los orígenes de la estrategia de conexiones e intercambios entre los clubes fotográficos latinoamericanos. Entre dificultades y limitaciones de diversa índole, esas interacciones comenzaron a tomar forma en el segundo lustro de los años treinta y se desarrollaron desde Argentina y Brasil hasta México y Cuba entre 1940 y 1960. 

Poco más de una década después del evento mencionado, en 1952, fue convocado en Argentina, con el auspicio del Correo Fotográfico Sudamericano, un homenaje al recientemente fallecido Alejandro Del Conte bajo la forma de una exposición-concurso. El Salón, denominado como Concurso Fotográfico Latinoamericano Alejandro Del Conte se exhibió ese mismo año en Buenos Aires congregando a representantes de los cuatro países arriba mencionados y de México.  Ese evento se constituyó en una forma de reconocimiento a Alejandro Del Conte y su revista por haber ocupado un lugar preeminente en la gestación de una conciencia de pertenencia latinoamericana en el ámbito continental del foto-clubismo de la época, tanto en la difusión como en el desarrollo de acciones para materializarla.

Esas acciones incluyeron como un hecho importante, más por sus objetivos que por su alcance, la inauguración por Del Conte, en 1939, de la llamada “Biblioteca Fotográfica de la revista Correo Fotográfico Sudamericano” con su libro Formulario Fotográfico. En el Prefacio de esta publicación, Del Conte dio cuenta de su motivación fundamental para emprender este proyecto de edición de libros:

“Para dotar a los países de América Latina de una literatura fotográfica propia, hasta ahora ausente, hemos decidido crear la biblioteca que se inicia con este volumen. Se trata, indiscutiblemente, de llenar un verdadero vacío y aunque ello nos signifique un esfuerzo, ya que debemos empezar por crear el hábito de leer en nuestros cultivadores de la fotografía, lo hacemos con la satisfacción que puede significarnos abrir rumbos de cultura en esta rama del arte en el continente.” 

De todas maneras, sería su propia revista el espacio desde donde ese hombre de profesiones e iniciativas múltiples que fue Alejandro Del Conte llevó a cabo su principal labor como un entusiasta promotor de la fotografía latinoamericana. El Correo Fotográfico Sudamericano logró una duración y sistematicidad poco comunes en América Latina para una publicación periódica caracterizada por ser un proyecto editorial personal. El primer número salió fechado el 24 de agosto de 1921, y alcanzó la cifra total de 860 con el último, editado el 15 de diciembre de 1959, estando la revista desde 1952 en manos de Estanislao Del Conte (1920 – ?), hijo de Alejandro. Concebida en sus orígenes como una publicación técnica e informativa para fotógrafos profesionales y aficionados, según se autodefinía en su propia portada, luego se distinguió a sí misma como dedicada a la fotografía y sus aplicaciones. Además, con el paso del tiempo, y sobre todo desde el segundo lustro de los años treinta en adelante, ganaron mayor presencia en el Correo los temas dedicados a cuestiones artísticas, desde las estéticas hasta las atinentes al desarrollo del campo fotográfico y sus espacios discursivos, con Del Conte como principal contribuyente a la reflexión sobre estos temas. De manera coetánea, también se incrementó gradualmente la crítica de exposiciones, con la participación de varios colaboradores, incluyendo a Del Conte. Ello se hizo posible porque los salones nacionales e internacionales de los foto-clubes argentinos generaron, desde la divisoria de los años treinta-cuarenta, un circuito expositivo sistemático para la circulación en el país de la producción fotográfica de intención artística, concebida dentro de la red internacional foto-clubista, el cual fue complementado con el crecimiento numérico de exposiciones individuales de fotógrafos locales.

Angelina R. de Del Conte, Buenos Aires, Argentina, ca. 1925. Autor: Alejandro Del Conte.
Impresión 50 x 60 cm sobre papel barilado gelatina-bromuro de plata. Negativo de vidrio 9 x 12 cm.